Por Marcelo Bertolami, director general de Intel para los países emergentes de Latinoamérica
La red 5G en Chile esta pronta cumplir un año, desde que se implementó oficialmente en el país. Actualmente son 366 las localidades beneficiadas con la nueva red móvil, entregando equidad territorial y beneficiando a más 300 mil personas que por primera vez podrán acceder a Internet.
Aunque desde sus inicios, las conversaciones y debates en torno a la implementación de esta tecnología han despertado todo tipo de dudas acerca de qué tan preparada se encuentra nuestra sociedad para la apropiación de estas redes. Sin embargo, no cabe duda que esta tecnología ya está generando una interconexión nunca antes vista entre personas y máquinas.
La correcta implementación de esta tecnología ya genera un impacto positivo en el desarrollo del sector empresarial y del país en general. Desde Intel, como líder en la industria, se considera que el éxito de estas soluciones 5G se basa en los cambios fundamentales que se realicen desde la nube, las redes y los dispositivos con el fin de estar preparados para la habilitación de la tecnología como parte del desarrollo del país.
5G y Edge Computing
Para aprovechar al máximo todo el potencial de la tecnología 5G y Edge Computing, es necesario proporcionar potencia de procesamiento en el borde y manejar fácilmente distintas cargas de trabajo que se poden traducir, por ejemplo, en análisis de videos a en vivo que servirían para la conducción autónoma o mismo la ejecución a la perfección de la telemedicina durante una cita médica más delicada o una cirugía. Eso es importante para aumentar la eficiencia, reducir los costos y aumentar el valor para el cliente a medida que se administra la infraestructura de la ciudad, los eventos deportivos y públicos grandes en otras industrias.
A medida que los operadores trabajan en habilitar las redes de acceso por radio virtualizadas, también conocidas por su acrónimo en inglés, vRAN, o abiertas, conocidas del inglés como Open RAN, en todo el mundo, casi todas las implementaciones comerciales se ejecutan con tecnología Intel. Estamos redoblando nuestro compromiso de continuar desarrollando un ecosistema vibrante para permitir que el vRAN o las Open RAN se entregue con un rendimiento sin concesiones y cumpliendo con las métricas clave de los operadores.
Lo que estamos viendo en el mercado son nuevas mejoras en las instrucciones de procesamiento de terminales específicas de 5G, las cuales fueron diseñadas para admitir el procesamiento de señales específicas RAN, ofreciendo ganancias en la capacidad de hasta dos veces para vRAN y Open RAN admitiendo capacidades avanzadas como alta densidad celular para 64T64R Massive MIMO. Esto abre el camino para que los clientes implementen vRAN y la Open RAN en los entornos más exigentes del mundo.
Sumado a lo anterior, diferentes chips con aceleración integrada están siendo optimizados para cargas de trabajo vRAN y Open RAN, de tal forma que los clientes tendrán mayor flexibilidad y puntos de optimización a medida que construyen sus redes.
Pasando a hablar de las ciudades inteligentes, estas pueden llegar a utilizar la adquisición de datos y el procesamiento de bordes de una variedad de sensores para crear un gemelo digital de alta definición o un modelo virtual de las carreteras físicas. Lo anterior permite una supervisión y una previsión más detalladas del tráfico o de las condiciones de la carretera a lo largo del tiempo.
Estas ricas capas de datos 3D crean oportunidades para optimizar la programación de señales de tráfico, advertir sobre el mal tiempo y otros peligros. Con eso, estamos transformando la forma en que funcionan las ciudades.
La tecnología de carreteras inteligentes, por ejemplo, puede ayudar a mejorar la gestión del tráfico de vehículos y la seguridad de los peatones, al mismo tiempo que respalda nuevos modelos comerciales que aprovechan la infraestructura como servicio.
De igual forma, la tecnología inalámbrica 5G de alta velocidad y baja latencia envía datos de los sensores a un modelo de IA en un servidor ubicado en una unidad al borde de la carretera. En este sentido, al analizar los datos en la carretera casi en tiempo real, se pueden enviar alertas de seguridad para advertir a los conductores sobre una posible colisión, mejorando la seguridad vial y la eficiencia del tráfico.
Lo anterior es fundamental para lograr que el 5G alcance su máximo potencial. Esto nos permitiría pasar de los primeros en incorporar la red en Latinoamérica, a ser los primeros en integrar ciudades inteligentes en la región.
Hoy en día empresas como Intel, ya planifican la integración de nuevas hojas de ruta en base a la automatización, pero no bastara si como país no existen políticas públicas, coordinación y sentido ciudadano, que unifiquen dicho desarrollo.